Hace
unas semanas y con mucho acierto, la principal agrupación de toreros del Perú,
SITOPE, hizo público un comunicado en el cual se prohibía que los Matadores de
Toros actuasen en festejos taurinos sin picadores. Esto por donde se mire, y a
pesar de que en la realidad a muchos pueblos se les complica la organización de
sus corridas y a muchos matadores de toros se les reduciría considerablemente
el número de festejos a torear, es una medida importante que contribuye a la
formalización de nuestra fiesta sobre todo en el interior del país.
Llevar
esto a la realidad, es aún más complejo, porque la informalidad es la reina de
los andares taurinos en nuestro medio y estoy casi seguro que muchos matadores
de toros tanto nacionales como extranjeros verán la forma de no cumplir con
este importante requisito.
Pero
el tema que ahora nos preocupa, es tal vez algo reiterativo, ya que desde el
pasado año procuramos hacer una campaña al respecto, pidiendo incluso papeles
al señor Pepe Cárdenas de las denuncias hechas a la agrupación que él
representa, los cuales nos fueron negados en repetidas ocasiones, muy
toreramente por cierto, pero negados al fin de cuentas. Por ello es que
nuevamente volvemos al tema de la documentación en regla de los toreros
extranjeros que hoy en día ven en el Perú, con un sitio que en sus propios países
no tienen, ya no sólo matadores de toros, sino también rejoneadores y hasta
novilleros sin caballos.
La
pregunta que seguramente ustedes se formulan, es que si este hecho, de la proliferación
de toreros extranjeros en Perú es buena ¿?
Nuestro
punto de vista al respecto nos señala que sí, por supuesto que es bueno,
siempre y cuando estén al día, en regla, con absolutamente toda su
documentación que les permita actuar en iguales condiciones con los toreros
peruanos.
Qué
significa estar en regla, por ejemplo, estar afiliados a alguna agrupación gremial
reconocida por el ministerio de trabajo, entiéndase pase inter-sindical, contar
con su visado de artista o trabajo correspondiente otorgado en el país de
origen y tener en cuenta que esa VISA se otorga sólo por el tiempo de los contratos
presentados a las autoridades correspondientes, la cual tiene una caducidad y
que el representante peruano del torero debe estar registrado para tributar por
las rentas que percibe el torero, así como pagar los derechos sindicales (clínicas,
mensualidad y actuaciones). Cabe recordar, que un torero extranjero con visado
de artista no puede firmar contratos según tenemos entendido sino su
representante peruano.
Así
es de simple, pero lamentablemente no se cumple en la gran mayoría de los casos,
con lo cual hacen de nuestro país una cazuela de informalidad y eso no es justo
para nadie.
Ojo,
que no estamos tocando el tema de los emolumentos que perciben, que muchas
veces no cubren ni sus gastos y les cuesta torear, pero suman corridas mal que
bien, con la finalidad de manejar una prensa que mal informa poniendo una “pachanga
taurina” al nivel de una corrida formal, por el sólo hecho de llenar espacios
en sus medios. Este tema, el de los sueldos que perciben, ínfimos, y sin nada
de categoría para un torero, es otro asunto, que ya tocamos el pasado año, pero
que no tuvo respuesta ni siquiera de los propios toreros peruanos, lo cual me
pareció lamentable, pero al final de cuentas es un terreno que probablemente no
nos compete.
El
asunto en cuestión sobre la informalidad de los toreros extranjeros en el Perú
si es un asunto que interesa a todos los que queremos que nuestro país comience
a tener la categoría que se merece, porque año a año, hay mejores festejos en
provincias, y plazas de toros de categoría. Es evidente que nuestro Perú taurino
hoy en día, ya está en boca de todos los profesionales del toro del mundo, y es
por algo. Por ello debemos seguir creciendo año a año, temporada tras
temporada, pero para eso, es imprescindible que los profesionales peruanos,
toreros, ganaderos, empresarios, comisiones, mayordomías, apoderados, representantes,
prensa en general, aporte con lo que cada uno considera que es beneficioso para
la formalización de nuestra fiesta.
Claro
está, que mientras un conjunto de representantes presentan su nómina de toreros
para cada año a principio de temporada, tengan a bien hacerlo como se debe
hacer, con la documentación en regla, así nadie tendrá queja alguna, no habrán
denuncias a las autoridades y se habrá aportado un paso importante hacia una
fiesta nacional peruana, con categoría y responsabilidad de peruanos de bien.
Nuestro
portal, estará llano a recibir las denuncias del caso, siempre y cuando se
proporcionen los documentos probatorios respectivos y los nombres de las
personas que no están cumpliendo con este requisito, para ser publicadas y que
la opinión pública sepa quién o quienes infringen y fomentan la informalidad.